Sábado 27 de abril de 2024

Mons. Colombo: 'La Palabra de Dios es imprescindible para el creyente y la comunidad'

  • 22 de enero, 2024
  • Mendoza (AICA)
El arzobispo mendocino destacó su importancia y necesidad, y recordó que "desde ella partimos, con ella nos nutrimos y somos fortalecidos para el testimonio cristiano de la fraternidad y solidaridad".
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El arzobispo de Mendoza, monseñor Marcelo Colombo, presidió la misa del Domingo de la Palabra de Dios desde el Carmelo del Espíritu Santo, ubicado en la ciudad mendocina de Luján de Cuyo, e indicó que en la primera lectura, tomada del libro de Jonás, el Señor “propone una reflexión en torno al arrepentimiento de un pueblo paradigmático por su crueldad, según los conceptos de la época”.

“Se trata de un texto escrito en el tiempo del post exilio, cuando se ha regresado a Israel después del cautiverio”, explicó, y agregó: “Probablemente estén viviendo una suerte de proceso xenofóbico, ante el cual el autor sagrado quiere llamarles la atención”. 

“Ese pueblo, así de duro, hace penitencia y responde a la exhortación divina de cambiar. De paso, es una crítica a los sectores más rígidos, que se sienten dueños de la religión y de la moral. También para ellos y la dureza de su corazón, hay una invitación a convertirse”, precisó.

El arzobispo mendocino aseguró que “la invitación de Dios a la conversión es eficaz, si es acogida de corazón y obedecida por toda persona de buena voluntad; si estamos encerrados en nosotros mismos, si somos duros de corazón, aunque seamos muy religiosos podemos perder esa oportunidad”. 

En relación a la segunda lectura, el prelado subrayó la exhortación a “vivir en plenitud el propio estado de vida, mientras esperamos la venida del Señor”, y puso el acento en la segunda parte del Evangelio, donde “hay una llamada personal al seguimiento del Señor y a la vida fraterna en comunidad”.

“El proyecto de Jesús no es para solitarios, sino para personas que gustan vivir en comunidad y saben que, con sus luces y sombras, ésta es un instrumento al servicio de la vida de fe y de la realización del Reino de Dios”, sostuvo.

Monseñor Colombo recordó que la Iglesia celebra, el Domingo de la Palabra de Dios el V domingo del tiempo ordinario y que, a través de ella, se transmite la voluntad de Dios para su pueblo, la cual constiste en "vivir en la Palabra recibida de corazón. Permanecer es salir y no estancarse, para poner los propios pasos en las huellas de Jesús. Es una invitación a dinamizar nuestras opciones y las exigencias de nuestras vidas para andar según el querer de Dios”.

“La Palabra de Dios es importante, imprescindible, necesaria, para la vida del creyente y de la comunidad. Desde ella partimos, con ella nos nutrimos y somos fortalecidos para el testimonio cristiano de la fraternidad y la solidaridad”, concluyó.+