A más de dos meses de las inundaciones y gracias a una organización y logística rápida, la institución eclesial asistió con donaciones a más de 50 barrios de esta ciudad bonaerense.
La jornada reunió a fieles de la arquidiócesis para reflexionar juntos sobre el camino de una Iglesia que escuche, participe y anuncie en comunión, guiada por el Espíritu Santo.
El arzobispo de Bahía Blanca destacó la figura del Buen Pastor en el Evangelio y trazó un perfil del nuevo papa León XIV, a quien definió como "un regalo de Dios para la Iglesia".
El arzobispo de Bahía Blanca invitó a vivir el envío misionero, la alegría cristiana y el perdón cotidiano, señalando que el legado más grande no es material sino espiritual: haber conservado la fe.