Al-Sisi: Los 21 egipcios asesinados son verdaderos "mártires"
- 17 de febrero, 2015
- El Cairo (Egipto)
El corazón de Egipto está al mismo tiempo devastado y conmovido por la horrible decapitación de 21 cristianos, ciudadanos egipcios en Libia, por mano de los jihadistas aliados al Estado islámico. El gobierno egipcio decidió declarar luto nacional por 7 días. Ayer el presidente al-Sisi fue personalmente a visitar al patriarca Teodoro, para presentarle oficialmente el pésame. Al-Sisi anunció que estos 21 egipcios asesinados en Libia son verdaderos "mártires", como los conciudadanos asesinados recientemente en Sinaí.
El presidente egipcio, además, otorgó a cada familia de los muertos una donación de 100 mil esterlinas egipcias (unos 13 mil dólares Usa), además de una jubilación y atenciones médicas para todos los miembros de las familias. Los jóvenes asesinados eran casi todos de pueblos del Alto Egipto y habían emigrado a Libia para trabajar y ganar lo suficiente para casarse o para mantener a la familia en la patria.
Por su parte la Universidad Al-Azhar denunció el "horrible crimen". El Shaykh Ahmad al-Tayed, jefe de Al-Azhar, la más alta autoridad sunnita en el mundo, como también ShawqiAllam. Gran Muftí de Egipto, reafirmaron que el islam y las religiones celestiales no pueden justificar tales crímenes.
Mientras que Teodoro, el patriarca copto, dijo que la nación no tendrá paz hasta que estos criminales no sean castigados.
El Patriarca, jefe de la Iglesia copta y patriarca de Alejandría, recibió numerosas visitas de pésame, oficiales y privadas. Entre estos estaba también el encargado de los asuntos de la nunciatura, acompañado por el padre Rafic Greiche, vocero de la Iglesia católica en Egipto. Durante la noche el mismo Papa Francisco llamó por teléfono a Teodoro, asegurándole que hoy se unirá en la oración con todos los cristianos de Egipto.
Desde hace semanas que la atención de Egipto está centrada en las noticias que se referían a los egipcios arrestados por los jihadistas en Libia. A fines de diciembre surgió la noticia del asesinato en Libia de una familia egipcia compuesta por un doctor copto, su esposa y su hija de 13 años. Ellos fueron asesinados porque eran egipcios y cristianos. Desde aquel momento, la prensa y la opinión pública empezaron a pedir a todos los egipcios que abandonaran Libia.
En la actualidad, al menos 1,5 millones de egipcios residen en Libia. El jefe de Estado dio disposiciones al Ministerio del trabajo y de emigración para que bloqueen toda visa de salida para Libia y prometió ayudar a cada egipcio para el repatriarlo.
La dolor por la víctimas despertó una especie de unidad nacional frente a las amenazas constituidas por el movimiento jihadista. Hsata los líderes musulmanes integristas denuncian los asesinatos. El jefe del movimiento slafita A-Nur afirma que "este horrible crimen refuerza la cohesión de los egipcios". Todos los partidos políticos y los ambientes religiosos musulmanes están unidos en la condena de estos asesinos y de los continuos ataques del EI contra Egipto y los egipcios.+
