El arzobispo recordó que la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones es "una oportunidad para rezar por quienes sienten en su corazón la opción de vida al sacerdocio y a la vida consagrada".
El arzobispo destacó la importancia de este Domingo del Compartir, al recordar que "la misión de la Iglesia no se sostiene sola". "Cada gesto de solidaridad, cada pequeño aporte, es un acto de fe".
"Gracias por habernos recordado que la ternura no es debilidad, que la verdad no necesita gritar, que la Iglesia puede ser madre y hospital de campaña", expresó el arzobispo sanjuanino.
El arzobispo se plantea una serie de interrogantes y expresa su deseo de que el sucesor sea de "oración, calle y escucha" y "tenga el coraje de seguir caminando con ese bastón de pastor".