Urgencia climática: Mons. Lozano alerta sobre el 'duelo entre la razón y el bolsillo'
- 15 de noviembre, 2025
- San Juan (AICA)
El arzobispo de San Juan llamó a decisiones valientes en la COP30 de Belén y pidió priorizar el bien común frente a presiones económicas en medio de la creciente crisis ambiental global.
El arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Jorge Lozano, reflexionó sobre la tensión entre la razón y los intereses económicos al analizar el contexto de la COP30, la Cumbre Climática de las Naciones Unidas que se desarrolla del 10 al 21 de noviembre en Belén, Brasil. En su mensaje, advirtió que las decisiones que allí se adopten "marcarán el rumbo de las próximas décadas".
El prelado señaló que, ante los desafíos actuales, a veces las personas y los gobiernos actúan tras evaluar riesgos y beneficios, pero en otras ocasiones "nos dejamos llevar por impulsos afectivos o por presiones de grupos poderosos", lo que deriva en decisiones apresuradas que comprometen el futuro común.
La COP30 reúne a representantes de más de 190 países, científicos, activistas y organizaciones civiles para debatir estrategias destinadas a mitigar la crisis climática.
Encuentro ético y político, no sólo técnico
Monseñor Lozano destacó que el encuentro no es sólo técnico, sino también "ético y político", ya que las decisiones afectan especialmente a quienes padecen con mayor crudeza los efectos del deterioro ambiental: comunidades indígenas, familias desplazadas, migrantes involuntarios y pueblos empobrecidos.

En esta línea, recordó el pedido de los obispos de Estados Unidos, junto con las conferencias episcopales de Asia, África, América Latina y el Caribe, que exhortaron a los líderes mundiales a adoptar medidas "urgentes y valientes" para resguardar la creación y proteger a los más vulnerables.
Asimismo, mencionó el mensaje del papa León XIV, quien instó a los participantes de la cumbre a "escuchar el clamor de la Tierra y de los pobres", subrayando que la crisis afecta de manera desproporcionada a quienes menos han contribuido a ella.
Entre los puntos más sensibles del debate global, Lozano apuntó a la reducción efectiva de emisiones de gases de efecto invernadero y a la transición hacia energías limpias, advirtiendo que estos procesos deben realizarse sin profundizar desigualdades ni comprometer el desarrollo de los países más frágiles.
Finalmente, sostuvo que replantear los actuales modelos de producción y consumo es indispensable para evitar que "la prosperidad se construya a expensas de la naturaleza y de los más débiles". Y concluyó que sólo un compromiso real podrá frenar la crisis climática: "Escuchar el clamor de la Tierra y de los pobres es escuchar el clamor de nuestra propia humanidad".+
