FASTA celebró la misa por el 40º aniversario de la fraternidad sacerdotal
- 28 de agosto, 2025
- Buenos Aires (AICA)
La celebración fue presidida por Mons. García Cuerva, quien durante la homilía reflexionó sobre el llamado a vivir con sencillez y a abrir el corazón al mensaje universal de Dios.

La comunidad de FASTA celebró, el 24 de agosto, la misa en conmemoración del 40º aniversario de la fraternidad sacerdotal. La Eucaristía fue presidida por el arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva.
Durante la homilía, el prelado expresó: "En primer lugar nos dice el Señor, traten de entrar por la puerta estrecha. Lo que nos está diciendo es, hermanos, traten de andar por la vida liviana de equipaje. Sáquense de encima broncas, rencores, baúles de prestigios que se dan ustedes mismos. Traten de sacarse de encima medallas y aplausos. Traten de ser más sencillos porque la puerta es estrecha".
En otro momento de su mensaje, agregó: "Qué lindo volver a sorprendernos, dejarnos sorprender por Dios de que el mensaje es para todos. Que nadie quede afuera, que la puerta sea estrecha, pero que nunca sea estrecho nuestro corazón y nuestra mente, creyendo que el mensaje de Dios es para unos pocos entre los que, por supuesto, estamos nosotros".
"Recordemos siempre que si nosotros conocemos un poquito más a Jesús, si hemos tenido la gracia de recibir los sacramentos y nos sentimos miembros activos de la familia de Dios, que es la Iglesia, es por pura gracia de Dios, no es por mérito personal", recordó y completó: Vamos entonces a pedirle hoy a Dios, en primer lugar entonces pasar por la puerta estrecha, que cada uno se lleve esta pregunta, ¿de qué me tengo que desprender para andar liviano de equipaje en mi alma y en mi corazón?"
No chapiemos delante de Dios
Tras plantear "¿de qué tengo que también ampliar mi cabeza y mi corazón? Porque a veces me cuesta entender que el mensaje de Dios es para todos. Es un mensaje universal", pidió, en tercer lugar, "no chapiemos delante de Dios a bajarnos y entender que todo es gracia de Dios".
"Por eso tenemos que dar gracias todos los días al Señor. Que Dios los bendiga mucho. Una vez más, gracias, hermanos sacerdotes. Gracias a todos ustedes. Muchas gracias por lo que hacen en la Arquidiócesis y también en otros lugares. Así que de corazón y una vez más cuídenlo a Gabriel, eh, cuídenlo, que necesitamos curas con empuje, que se coman la cancha. Y bueno, recién empezás, así que dale para adelante", concluyó.+